Adicción al Trabajo: 8 consejos para reconocerla.

Adiccion al Trabajo Javier Ares Arranz Psicologo Online

La adicción al trabajo es una de las alteraciones psicológicas que caracterizan a nuestro siglo, dado que hoy en día el sacrificio constante por progresar laboralmente es visto como un valor positivo y, por otro lado, la distinción entre la vida privada y la vida laboral ha ido desapareciendo.

Esto último resulta especialmente cierto en países como España, en los que una gran parte de la población laboralmente activa está compuesta por autónomos, por lo que la auto-explotación llega a estar muy normalizada.

Según investigaciones de la Universidad Jaume I, más de 1 de cada 10 trabajadores padece una adicción al trabajo en España y cerca del 8% de empleados trabajan más de 12 horas al día. Por ello, es fundamental aprender a detectar cuando antes las señales de la adicción al trabajo.

¿Cómo saber si sufro adicción al trabajo?

La adicción al trabajo es una alteración que, técnicamente, es identificada como tal únicamente por parte de profesionales de la salud mental; sin embargo, cualquier persona puede conocer las señales de alerta que permiten detectar de un modo aproximado las posibilidades de estar sufriendo dicho problema. Veamos cuáles son.

1. Casi siempre te sientes mejor cuando trabajas que cuando no trabajas (y no por el dinero)

Una de las primeras señales que nos indican una posible adicción al trabajo es el cambio psicológico y anímico que experimentan las personas en cuanto se incorporan a su lugar de trabajo o iniciar su jornada laboral.

Lo que sienten las personas que tienen este tipo de adicción es una sensación de alivio cuando están trabajando, mientras que al dedicar el tiempo a otras cosas, sienten una cierta inquietud que se va acumulando, una angustia, por lo que surge una necesidad casi física de ponerse a trabajar o de seguir adelantando trabajo.

La obsesión con el trabajo es tal que cuando no lo están desempeñando suelen hablar constantemente de sus obligaciones laborales y de todo cualquier tema que se relacione con su trabajo.

2. No sabes decir “no” al trabajo

Otra de las características clásicas de la adicción al trabajo es la incapacidad para decir no a cualquier proyecto laboral o a cualquier responsabilidad añadida que pueda recibir la persona en un momento determinado de su jornada laboral.

Este fenómeno se debe al deseo de tener siempre actividades que hacer, incluso más allá de la jornada laboral y a la necesidad de complacer tanto a compañeros de trabajo como a jefes o cargos superiores de todo tipo. Se asocia al sentimiento de culpa ante la idea de tener tiempo libre en el que verdaderamente se desconecta del ámbito laboral.

Si nosotros o algún compañero tenemos dificultades para declinar propuestas de proyectos o mayores responsabilidades laborales, debemos tener en cuenta de que podemos estar ante un caso de adicción al trabajo.

3. Descansas poco de manera sistemática

Dormir pocas horas durante la semana laboral o bien no dedicar el tiempo necesario a descansar y desconectar del trabajo es otro de los rasgos con los que podemos identificar un caso de adicción al trabajo.

Desconectar de las obligaciones laborales resulta de gran importancia ya que nos permite recargar pilas y coger fuerzas para reincorporarnos de nuevo al trabajo con más energías y mayor nivel de motivación.

Sin embargo, muchas personas adictas al trabajo no dedican las horas suficientes a descansar y a dormir bien e incluso tienen problemas para conciliar el sueño porque no dejan de pensar en sus responsabilidades; es por eso que acaban haciendo su trabajo cansados o con elevados niveles de sueño, algo que a su vez hace que sea más fácil que se les acumule el trabajo y aumenten sus motivos para pensar en ello.

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4. Tus relaciones sociales se ven afectadas

La obsesión con el trabajo y la necesidad de estar trabajando cuantas más horas del día mejor acaba por deteriorar las relaciones sociales de cualquier persona, tanto las relaciones entre compañeros de trabajo como las relaciones sociales más cercanas.

La adicción al trabajo afecta directamente a la salud mental de la persona que la padece, haciendo que su estado de ánimo sea cada vez más negativo y sus interacciones sean conflictivas en todo momento.

Es por eso que muchas personas acaban teniendo conflictos con sus compañeros de trabajo o superiores y también con sus amigos, familiares o incluso con sus parejas.

5. Elevado nivel de perfeccionismo

Las personas adictas al trabajo suelen ser muy perfeccionistas con su desempeño laboral y con su rendimiento, algo que acaba ser contraproducente y que puede afectar incluso y la permanencia en su lugar de trabajo.

Este perfeccionismo exacerbado acaba llegando a niveles tan elevados y absurdos que se acostumbran a generar conflictos con compañeros de trabajo o superiores debido al incumplimiento de entregas en el tiempo establecido, lo que pone en riesgo los intereses generales de la empresa.

6. Necesitas tener el control

Muchas personas que padecen un caso de adicción al trabajo suelen considerar que solamente ellos pueden realizar el trabajo bien hecho, motivo por el cual necesitan tener control total y permanente de todos los procesos de cualquier trabajo o proyecto laboral.

Esta obsesión con controlar hasta el extremo cualquier proyecto, incluso aquellos que son colectivos, también es fuente de gran cantidad de conflictos y de discusiones entre compañeros de trabajo con la persona adicta.

7. Aparente incapacidad de delegar tareas

Tanto el elevado nivel de perfeccionismo como la necesidad de controlarlo todo, acaba provocando que la persona sea incapaz de delegar tareas determinadas a otros compañeros o incluso a subordinados.

Esto acaba ocasionando que se produzca un exceso de trabajo en la persona, quien no siempre es capaz de terminar con éxito cualquiera de sus obligaciones o responsabilidades.

8. Afectación física

Son muchas las afectaciones físicas que pueden acabar desarrollando las personas adictas al trabajo, entre las principales destacan los dolores musculares, el dolor de cabeza, la sudoración excesiva, el insomnio o la taquicardia.

Todas estas afectaciones se pueden interrelacionar con las afectaciones psicológicas asociadas a este tipo de adicción, lo que afecta directamente a la salud mental y física de la persona.

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Me llamo Javier Ares Arranz y soy Psicólogo especialista en Psicología General Sanitaria por la UDIMA además de otros másters y habilitaciones que puedes ver en mi LinkedIn

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